Aquí la vida se va creando por períodos estacionales o de continuos indescriptibles…
Se trata de describir más que de definir…
No se busca la exclusión ni la predestinación mística… Eso solo lo sabe Dios…
Los colores llegarán con el tiempo… Se fué el luto...
Hay otro tiempo...
Sus palabras entran más acá...
La vida en comunidad me ha abierto a la verdadera batalla espiritual: la batalla de caminar hacia la luz precisamente cuando la oscuridad es tan real.
Henri J. M. Nouwen, "El Regreso del Hijo Pródigo"
Hace frío... Pero no lo se... Es que se me han dormido los nervios.
Petit habla de parestesia, electromiografías y de presiones que pueden significar multipicidad de cosas... Por el momento sólo quisiera sentir frío... Ya que hace frío... Pero como ya dije mis nervios están an-incorporados, anestesiados, disociados, divididos contra sí mismos ("...o es que una casa dividida contras sí misma puede permanecer en pie..."), apocados... Sin texto, sin cuerdas vocales, sin labia, sin nada querer decir y teniendo mucho...
El "Cepillo de Dientes" de Diaz me explica... Yo asiento... Comprendo... Y no puedo hacer nada...
Pero hay luz, tiene que haber... Aunque mis nervios ópticos no me permitan todo el color y contraste que sería suficiente para ver el frío... Hay luz... Creo percibirla a través de mis párpados paquidermos con Fe...
Cuando dos meses antes de las presentaciones, le dije a la Dani lo de que iba a ser Jesús en el Experimento, se preocupó, porque dijo que ya no podría estar conmigo, porque Jesús no podía tener polola ya que era el Hijo de Dios... También me dijo que como a todos los Jesús de las películas, nunca más iba a poder hacer otro papel... Yo sólo me reía... Aunque recuerdo que cada vez que me toca actuar en algo, ella se muestra después algo traumada...
Posterior a la presentación en la iglesia
Bué... Aunque tiene razón en parte, en eso que tiene que ver con que las cosas cambian cuando a uno le toca ser Jesús: El lleno de Vida, y hermoso y perturbador Jesús...
Benjamín, esposo de la Ruth, estuvo cocinando para nosotros
Ya habíamos llegado el domingo en ese cálido y luminoso primer día de presentación.
La mamá de Benja. Debo decir que eché
de menos sus comidas luego del retiro/ensayo,
en el Campamento Nacional
Estábamos emocionados de por fin haber representado el Evangelio. Al día siguiente se daría comienzo al Campamento Nacional. Estudiaríamos el Evangelio de Marcos y la primera noche del retiro se daría la bienvenida a través de la segunda presentación del equipo, del Experimento Marcos.
Esta vez presentaríamos ante nuestros amigos, nuestros conocidos. Yo no se si eso es bueno o no. O si es mejor o peor... El asunto es que los ojos de nuestros amigos conocerían eso de lo que durante varios meses, se había creado una expectativa, y esa noche era la noche para que ellos vieran si es que el tan mencionado Experimento era lo que prometía ser o no.
Fué llegando la gente a medida que avanzaba el día. Y el grupo de menos de 20 personas pasó a ser de más de 60... Debo reconocer que me sentía raro. Es como desenchufarse de una realidad con los chicos, en los que nos mirábamos y comprendíamos qué queríamos decir, a tener que comenzar a explicarnos. Hablamos entre algunos de nosotros de ser cuidadosos de creernos demasiado de poseer un conocimiento que los demás no.
Con gran parte del elenco, luego de meditar y
hacer un devocional espontáneo en los descansos del ensayo
Que eso tan bonito no se fuera a chacrear porque "lo habíamos experimentado desde adentro" o "antes". Recuerdo que me volví más callado durante el Campamento Nacional y pensaba muchas cosas, sobre lo que significa vivir sin culpa, o por ejemplo, lo que significa que Dios sea lo único cierto, dentro de todas nuestras incertidumbres (cosas que ya traía en mi bolso desde el Conosur, pero que se intensificaron en el nuevo retiro, ya eran 3 retiros seguidos en un verano...)
Andrew Page. Creador del Experimento Marcos
Y desayunamos y almorzamos y tomamos once (cenamos...) y... y...
Se les dió la bienvenida a los amigos que venían a la representación. Se les dió las instrucciones sobre sus cosas, que cuidaran de guardar sus pies, que no tomaran fotos y grabaran videos, que lo disfrutaran. Esta vez, Andrew habló algunas palabras. Jo tradujo. "Enjoy it!" y "Praise the Lord!", fué dicho otra vez por nuestro querido e inglés director y él nuevamente pudo escuchar en audio español chileno, cómo sonaba el Experimento Marcos en una lengua que él no manejaba (el gran Andrew habla 4 idiomas, pero ninguno de ellos es el español y expresó lamentarlo sinceramente).
Y Jo nuevamente dió la introducción de Marcos, y nosotros nuevamente entramos en la escena de Juan el Bautista, otra vez Gustavo dijo las palabras de Dios Padre y Jesús declaraba a los tres grupos asistentes, (pero esta vez eran nuestros amigos más cercanos quienes llenaban las sillas):
-¡El tiempo se ha cumplido...! ¡El Reino de Dios se ha acercado...! ¡Arrepiéntanse y crean las buenas noticias...!
La Wely, la hermana del Pedro Valenzuela (y una amiga muy cercana también, con la que tenemos una relación como de hermanos, me dijo que al principio sintió deseos de reirse, cuando aparecí hablando esas palabras... Me decía que hacia el final, en la crucifixión estaba al borde de las lágrimas... Y al final lloraba junto con el Pancho Céspedes, un estudiante del GBU de Concepción y hermano de Verónica; ella hizo de fariseo) estaba ahí, también estaba el Pedro, la Jana Venegas, el Hans, el Dani Toledo y la Anita, el Dani Sandoval, el Pablo Pavez, la Kathy Castillo... Y muchos más conocidos y algunos pocos por conocer... por supuesto, la Dani también estaba, un poco nerviosa, tomada del brazo de la Jana... Eran un desfile de personas, que me conocen en infinidad de situaciones, personas a las que uno no les puede engañar y decir que de pronto uno se ha transformado en Jesús. Con la gente de Victoria, que no lo conoce a uno, a uno no se le notan las pifias, ellos ven el contenido de la obra y la forma que esta toma. Con mis amigos, allí el cartón de este Jesús de harapos, pintado con témpera y amarrado con scotsh (cinta adhesiva) en mis rajaduras se nota; con ellos no se puede fingir, no se puede actuar... O se puede, pero se nota lo actuado... Y Jesús se vuelve poco creíble cuando se hace por los méritos del actor (en caso de existir los méritos). El desafío entonces consiste en buscar que el Espíritu Santo nos guíe en el descubrimiento de Dios, a través de las palabras de Jesús y de su propia gracia que desciende y brota sin que sea uno la fuente de donde sale... Si salió bien, o al menos, aceptable para nuestros amigos esa noche, fué porque en su misericordia, Dios nos quiso acompañar de esa manera...
En un ensayo
Y nos acompañó mientras transcurrían las secciones. Cuando calmó la tormenta y la acústica del salón de Río Quino nos acompañó creando un sonido ultraenvolvente. Nos acompañó cuando comíamos con pecadores y cobradores de impuestos, cuando Él discutía con los fariseos, cuando íbamos camino a Jerusalén, cuando las parábolas salieron fluidas... Uno podía ver, a ratos, las caras de atención de los amigos y amigas, cómo el Evangelio los captaba de un modo maravilloso. Recuerdo dos cosas con nitidez sobre la presentación de Río Quino. Una de ellas muy personal, otra pública y vergonzosa...
La primera. En la entrega de Jesús por Judas a los fariseos, antes de los gritos de "crucifícalo" y "blasfemo", venía de un estado emocional super delicado, desde la entrada a Jerusalen, donde la indicación del director es que Jesús se pasea por el círculo en una actitud más bien neutra, seria... Mientras todos gritan "¡Hossana!", "¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!"... Luego todos gritarían lo opuesto... Y entre medio: La entrega. Y un segundo, en el que sentía a 5 centímetros de mi mejilla los gritos de Malem, de Juan el discípulo, que me decían con verdadera desesperación:
-¡Jesús, huye! ¡Arranca Jesús! ¡VETE DE ACÁ! ¡ARRANCA!- Y yo la miraba, queriendo pero no pudiendo... Jesús tuvo la opción de huir, pero no quiso, no deseaba sentir lo que sentía en ese momento, pero se expuso y vulneró a las manos de los malvados... Yo no podía llorar... Después podría soltarme... En ese momento, en el que había una pelea, yo no podía... Aún recuerdo los gritos desesperados de Jesús... Querer que se salve, pero a largo plazo es ilógico... Su salvación era nuestra condena eterna...
La segunda. Un poco antes de la entrega viene la oración en el Getsemaní. Jesús está muy triste. Es quizás uno de los momentos más tensos del Experimento. La desolación máxima de un ser humano que teniendo todo para salvarse decide no hacerlo, y como es Dios y nos ama no puede salvarse a sí mismo: Quiere morir por nosotros, aunque desearía que no fuese así, y finalmente va por nosotros para satisfacer la justicia de Dios...
Bueno. En ese momento tan solemne y decisivo para la humanidad, en la representación, la expectativa es:
-Padre... Todo es posible para tí... Pero si es posible, has pasar de mí este trago amargo... Pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya...
La realidad fué:
-Padre... Todo es posible para tí... Pero si es posible, has pasar de mí este trago amargo... Pero que no se haga tu voluntad, sino la mía - un segundo pasó, mentalmente decía "¿que no se haga TÚ voluntad sino la MÍA...? ¡No po', es al revés...! ¿Cómo la voy a arreglar? Si. Ya lo dije. Así que inmediatamente fué un- ¡NO! ¡No! Que NO se haga MÍ voluntad, sinó la TUYA...
Ls blasfemia no pasó inadvertida... Fué recordada por todo el evento en un papelógrafó titulado "Los Grandes Pensadores"... La dinámica era que si alguien decía una frase estúpida, se anotaba allí (se hicieron como tres papelógrafos llenos...). No fué sino la propia Jo Wilson quien anotó esa frase...
Me sirvió para aterrizar a la realidad en un contexto de retiro (en realidad 3 seguidos, 2 de ellos sobre el Evangelio de Marcos) de que si bien, yo tenía que hacer de Jesús, que nunca se me olvidara que no era porque yo fuese tan capaz, sino que era porque justamente, yo necesitaba y necesito aprender más de Jesús, volcarme como un niño a aprender de Jesús, "porque el Reino de Dios, es de los que son como ellos".
Luego pude llorar en medio de la obra, y tras la crucifixión el Richards me cargó y pude descansar... Fué muy intenso para todos, físicamente, emocionalmente... Algunos quedaron disfónicos. Otros se volvieron un poco hacia dentro, más introspectivos... Otros quisieron hablar más...
La invitación al final fué la misma. A acercarse a los actores y preguntarles sobre lo que significó el Experimento... Nadie se acercó a preguntar... Sólo a felicitar y alejarse... Como que los chilenos no somos buenos para preguntar cosas profundas en ese momento, y en caso de hacerlas, uno no sabe cómo responder... Quizás esa indicación, sea precisa para otras culturas, acá quizás se podría hacer la invitación a preguntar en otro momento...
Fuimos a la piesa de Andrew y con todo el elenco, además de la Jo, tuvimos un tiempo de alegría, celebración, de cantos, de alabanza, de regalos a nuestros directores, de agradecimiento. Muchas palabras bonitas, mucha gracia inmerecida de Dios... Estábamos contentos. Gozosos. Andrew, nos dijo que era posible que nos sintiésemos mal en los días siguientes y que no sabríamos por qué. Que en el caso que llegara a pasar, leyéramos el Evangelio de Marcos, y que oráramos al Señor. Su indicación fué muy acertada. Estuve pegado al Evangelio todo el campamento, como si ya estudiar mañana, tarde y noche, sin contar las seis semanas de preparación y los 3 días de ensayo, no hubiesen sido suficientes...
Y eso fué el fin del Primer Experimento Marcos del Hemisferio Sur. No pudimos estar más felices, más gozosos, más radiantes. Dios fué bueno con nosotros. Llegó seguramente en el momento justo. Llegó a nosotros en este tiempo y nos dejó arrepentirnos nuevamente y nuevamente resucitar con él. Nos trajo nueva vida. Nos dejó nuevamente acercarnos al Evangelio como si fuese la primera vez...
La que no parece chilena es la Jo Wilson, intérprete de Andrew y co-directora de este Primer Experimento...
Me acuerdo de las palabras que dijo Jo, al final del Experimento Marcos, una invitación para los sensibles y los que no, para los con cultura de iglesia y para los que no, para los que se juran santos y para los que se enorgullecen de ser pecadores...: "Pero si nos abrimos a la realidad de un Jesús resucitado, puede ser el comienzo de una nueva vida". Inolvidable.
El abrazo de Jesús de cartón con fariseo favorito...
Un poco fleta la verdad (jajaja), pero creo que es en
una mínima expresión como decir que Jesús los perdonó
a ellos también... (Fíjense que nos pusieron scotch)
Y aquí algunas impresiones de la mayoría del elenco de este Primer Experimento Marcos. Gentileza de Pedro Valenzuela.
A las ocho de la mañana estábamos levantados. Habíamos preparado nuestra ropa que no dijera "Kiss Me Quickly" ["Bésame Rápido"], según el constante recordatorio de Andrew... Jeans para abajo, poleras sin logos distractores para arriba. Y ya desayunados, llegaron unos autos a buscarnos para llevarnos a la iglesia de Victoria...
El templo
Todo estaba dicho desde una perspectiva divina... Para nosotros, aún no. No podíamos verlo así... Bueno, hoy en día tampoco...
En la previa...
Ese domingo en la mañana, llegaron a Victoria también, el Dani Toledo y la Anita, GBUistas de Punta Arenas, no nos veíamos desde nuestras aventuras en Uruguay por el Conosur hace unos días atrás...
La iglesia en la cual íbamos a actuar, como actividad especial, había dejado para ese domingo la presentación del Experimento Marcos. Gustavo después diría sobre ello: "...cosa que en mi iglesia sería impensable...".
Oramos nuevamente en la iglesia. Ubicamos las sillas en forma del escenario no convencional. Ensayamos la sección 1 y la mitad de la 2 para ubicarnos en el espacio. La gente comenzó a llegar.
Las sillas dispuestas...
El encargado de coordinar la reunión ese día, le dio algunas instrucciones al público: No saquen fotos ni video, dejen sus cosas bajo los asientos y cuando los actores pasen por los entrepasillos coloquen sus pies bajo la silla...Y la Joanna "Jo" [Lease en español, "llou"]... la Jo dió la bienvenida y la introducción al Evangelio. La Jo es Inglesa y aprendió a hablar español con los modismos de los españoles... Y en ese mismo acento nos dijo a todos los asistentes desde el centro del escenario no convencional:
-Este... es el principio de Evangelio... Y el Evangelio son buenas noticias... Y las buenas noticias hablan de Jesús... Y sucedió como habían dicho los profetas en el antiguo testamento, que Dios mismo vendría a la tierra..., pero que antes enviaría otro a preparar el camino. Así que vino Juan el Bautista..."
Y una fila de personas entra en escena. Juan en esa oportunidad fué el Juan Quintanilla. El resto éramos personas que se bautizaban. Entre ellas estaba yo, que representaba a Jesús.
-¡Este es mi Hijo Amado, estoy muy complacido!- Decía Gustavo con voz fuerte, desde detrás de uno de los bordes del círculo, tras las personas. Se van todos y Jesús se dirige a los tres grupos de personas del público.
-¡El tiempo se ha cumplido...! ¡El Reino de Dios está al alcance de sus manos...! ¡Arrepiéntanse y crean las Buenas Noticias...!
No puedo seguir contando más detalles... Bueno, podría, pero no cuento porque no pueda, es que simplemente no tendría sentido. El Experimento Marcos es una obra de teatro... Bueno, se vive como estudio bíblico en las 6 semanas de aprendizaje, como un discipulado, como un devocional diario; como estudio bíblico empírico en los 3 días de ensayo. Cuando el día llega, como la representación visual en todas direcciones, de un drama cósmico que duró cerca de 33 años en la tierra y que rasga la dimensión del tiempo para dar lugar a Dios mismo que ingresa como viajero interdimensional a acercarse a nosotros como uno de nosotros, con todas las vulnerabilidades de las que adolecemos; No tiene sentido contarlo como para tratar de abarcar todo su significado útil en la explicación sino vas a invitar a alguien a la presentación o para invitarlo a actuar, así como tampoco tiene sentido contar "el significado útil" del Evangelio a alguien, un amigo o amiga, un familiar, cualquier cercano o alguien que pasa por ahí, si no lo vas a invitar a conocer las Palabras de Jesús, o la representación viva del pequeño Cristo que Dios lo invita a ser...
Así que transcurrieron las secciones. Entrábamos y salíamos del círculo, nos movíamos por los pasillos, los entrepasillos, nos cruzábamos por el círculo central. Recuerdo haber visto a la Anita, sentada junto al Daniel entre el público, con su Biblia abierta, siguiendo la representación. Yo recordaba las palabras de Jesús y la mayoría de los movimientos por el escenario no convencional. La mayoría, porque a ratos, de tanto cambio de lugar y diálogos con los fariseos o con las personas que querían ser sanadas, ya no me acordaba por dónde había que ir... Miraba a la Jo, que con su dedo índice, desde la silla del co-director, muy discretamente guiaba el tránsito de Jesús y sus discípulos. Sino, era la Malem, que estaba haciendo de el discípulo Juan, que silenciosamente me rozaba el codo y me indicaba para dónde íbamos...
-¡Vamos a Jerusalén!- Finalmente decía, "liderándolos"...
Al final de esa representación las personas de la iglesia nos dieron las gracias, el coordinador invitó al público asistente a "Conversar con los actores del Experimento Marcos y preguntarles, qué ha significado esta experiencia para ellos". No se nos acercó mucha gente.
[Foto oficial post presentación en la iglesia de Victoria con sus pastores]
Mis queribles...
Pasaron muchas cosas como de realismo mágico en esos minutos. Me acuerdo de tres, todas trancurrieron en el tiempo final de alabanza musical comunitaria que hubo para concluir la reunión.
Los fariseos y Caifás sosteniendo la moneda romana...
La primera. Estábamos con el Pancho Córdova, que había hecho de uno de los fariseos, desde ahí para adelante le llamo mi fariseo favorito; Cuando un niño como de unos 4 años se nos acerca y me indica con el dedo una "carta" (de esas que en Argentina les llaman "panadero") que volaba junto a nosotros, a la altura de nuestros ojos... El Pancho cuenta que cuando la tomé en el aire y se la pasé al niño, la expresión de él era como de si hubiese levantado un edificio con mis manos... Se fué a jugar con los otros niños... El Jesús de cartón que vió, le había hecho una hazaña que por su altura él no podía realizar...
La segunda. Vi que Lucho lloraba emocionado en un rincón, me acerqué a él y nos abrazamos. No quise preguntarle nada. El papel del discípulo Pedro, le había hablado cosas que en él llegaron profundamente y quizás con dolor... Estaba bien. Emocionado.
De pronto entre las sillas vacías, una señora de la iglesia ve a su hijo y le dice que se acerque, me explica que el chiquitito estaba preocupado por Jesús: no sabía dónde estaba después de que lo habían matado. Me dijo que cuando estabamos en la escena camino al Getsemaní, "Jesús" le tocó la cabeza (fué verdad, tuve que hacer memoria de ese detalle: al pasar, le toqué el pelo al niño que estaba sentado en la fila delante de ese entrepasillo). Lo llamé y le tome en brazos. Le dije que yo estaba vivo, que Jesús estaba vivo, que había resucitado. Le pregunté su nombre. El Lucho seguía ahí.
-Pedro- Me dice. Y veo cómo ante la mención de su nombre, el Lucho vuelve a llorar... Como si algo profundo siguiese hablándole...
La tercera. Cuando comenzó el momento de alabanza la Jo no podía estar más emocionada. Luego consultamos si es que alguien sabía algo, o de por qué... pero nada... Se escuchaba "Poderoso Dios" ¿Alguien había pedido esa canción? ¿Nadie comprendía cómo...? Jo, luego nos explicó que ese tema lo cantaban al final de las presentaciones del Experimento Marcos en España, que prácticamente era un himno que se cantaba, allá, entre esos europeos... Cuando la Jo nos contó eso, estaba emocionada... No podía creerlo...
Seguramente hubo más detalles hermosos y desconocidos...
Esta es la canción cantada por unos hermanos españoles...
Camino al río
Y más o menos así fué la primera presentación del Experimento Marcos del Hemisferio Sur, en una iglesia de una pequeña localidad al fin del mundo, "¡donde el diablo perdió el poncho!", como decían nuestros abuelitos. Yo creo que ese día perdió mucho más que el poncho, en Victoria...
Preparando la mesa para el almuerzo
Luego nos llevaron de vuelta al recinto de Río Quino. Había un sol radiante, todo brillaba con intensidad. Fué rico sentir nuevamente el olor de los eucaliptus que nos habían recibido 4 días atrás. Estábamos contentos, felices de la hazaña realizada. Durante la tarde de ese domingo almorzamos y fuimos al río.
Al día siguiente comenzaba el Campamento Nacional. Libro a estudiar: El Evangelio Según Marcos. Actividad de la primera noche. El Experimento Marcos.
Antes de viajar a Argentina, dejé comprado mi pasaje al Sur... Lo más barato que encontré, fué uno a 11.000 pesos chilenos, unos 22 dólares gringos (jaja, qué chistoso escribir así ahora...). No me fuí sólo. Fuí con el Pancho Córdova, el Lucho Vega y el Juan Quintanilla, también actores del Experimento Marcos...
Era de noche. El terminal estaba atestado de gente: los buses con retraso de media hora. Ese día, por el apuro innecesario, perdí mi chaleco favorito cuando me iba para el terminal...
Al rato nos encontramos con los chiquillos. El primero fue el Pancho. Luego entre la multitud, estaban el Lucho y el Juan. Al levantar mi mochila para encontrarme con ellos y quedar todos juntos, un tirante de mi mochila se cortó... Daba lo mismo. ¡Ya era cosa de esperar el bus e irnos para Río Quino...!
Nos fuimos en el bus memorizando las secciones... Cuando llegaron a la sección 4 yo estaba en silencio... Mientras los chiquillos, muy motivados decían el resto. Después nos pusimos a hablar de custiones de teologías y otras cosas canutas... Luego nos dormimos...
Los campos de trigo a la entrada de la carretera
Cuando iba a aclarando el día, hacía algo de frío aún dentro del bus. Nos bajamos, cruzamos la pasarela de la autopista y nos metimos a los caminos de tierra y piedras que nos conducían al recinto del GBUCh. Nos preguntábamos si es que nos estarían esperando, si es que alguien nos convidaría desayuno... Tiritábamos un poco y soñolientos, continuabamos caminando, haciendo crujir las piedras con nuestros pasos, mientras los campos de trigo y los eucaliptus nos daban la bienvenida al sur... De pronto me di cuenta que en el bus se me había quedado un sombrero de paja (nylon muy bien disfrazado), que había comprado en el Ta-Ta de Uruguay...
(Si: soy un jóven postmoderno que no distingue lo sintético de lo autóctono).
Su cara habitual era una sonrisa malévola
Llegamos. Al rato nos encontramos con la Abi y más olor a eucaliptus, unos perros amistosos (aunque no lo parecieran) y la preciosa vista del río Quino.
Desayunamos y dejamos nuestras cosas en la cabaña. Fué rico encontrarnos con el resto del grupo que iba llegando poco a poco durante la mañana y la tarde; Llegó la Malem, la Noelia, y la Karina, de la Facultad de Medicina de la U.de Chile, el Richards de Puerto Montt, los chicos de Chillán, el Javier y el Cristopher, la Vero de Concepción, la Emily misionera de Latinlink (y amiga de), la Ruth y Benja. Los dos últimos fueron los que coordinaron todo para el ensayo/retiro, junto con la mamá de Benja, que nos cocinó...
Luego llegó Angélica, asesora de UCU, el GBU de Colombia... También arribó Jessica, una Brasileña multicultural con la que nos conocimos en el ConoSur...
En la cocina, cuando era el almuerzo...
Malem cerrando los cojines que rellenamos...
Tantos detalles, tantas risas, rellenando los cojines de las camas, sentados en el suelo de madera en una rueda, mientras repasábamos una y otra vez las secciones, hasta que algo de la sección 4 y un poquito de la 5 entró en mi cabeza...
Cantando... "Yo tengo un gozo en el alma (GRANDE!!)"
Después de almuerzo, llegó Gustavo con la Johana "Jo" Wilson y Andrew Page, traductora y creador del Experimento Marcos, respectivamente. "The Mark Drama", se llama en el original.
Nos contaron muchas cosas; que todo había surgido de una idea de Andrew, para estudiar la Biblia en la ducha sin que se le mojaran las hojas... Y ya memorizado el Evangelio, la propuesta escénica... Al final, nos regalaron este libro...
Mucha oración breve, pero significativa, mucho "Praise de Lord!" de Andrew, mucho ir y venir en el escenario no convencional, que tendría al público, respirando la acción de una manera parcial llevada al extremo, pero no por ello menos impactante... Mucho caminar por los entrepasillos, mucho recordar las parábolas... Las parábolas... No pude decirlas completamente en el ensayo en que las vimos... Nos fuimos a acostar la noche del jueves con harto cansancio y alegría... Pero cansancio...
La Abi me despertaba muy temprano las dos mañanas siguientes, para que le cantara las palabras de Jesús y las repetimos muchas veces en la cocina del campamento... Pude aprenderme los textos de Jesús, al final, porque los asociaba con movimientos y ubicaciones específicas en el escenario no convencional... Era lo mejor que podríamos hacer, puesto que quedaban 3 secciones por ensayar y sólo 2 días para la primera presentación...
El viernes: Luego de la sección 2, Jesús se pone pesado, y desde la sección 4 en adelante, dista demasiado del Jesús de "Jesucristo SuperStar"... Angélica Delgadillo llegó a comentar en su boletín de UCU, lo mucho que le afectó la frase de Jesús en el evento de la expulsión de un espíritu inmundo de un niño; "Generación Incrédula", les dice, "¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? ¿Hasta cuándo voy a tener que estar entre ustedes?". Comparte que la palabra la apeló profundamente (http://www.ucucolombia.org/images/pdf/experimento_marcos.pdf).
O un poco antes, en la primera predicción de la muerte de Jesús, cuando Lucho, que encarnaba a Pedro, recibía un "¡Aléjate de mí Satanás! Tú no piensas en las cosas de Dios, sino en las de los hombres"
Llegó el sábado, último día de ensayo. Jo y Andrew siempre apoyándonos mucho, animándonos siempre, a pesar del cansancio por las largas sesiones de ensayo... En el break de la mañana, la Abi me decía que le repitiera las palabras de Jesús... Llegamos a la sección 5, en el evento de la petición de Jacobo y Juan...
Le repetía varias veces, muchas veces, a la Abi la pregunta "¿Pueden ustedes beber de la misma copa que yo bebo?", y de pronto, me costó respirar y una pena profunda e inexplicable me apretaba el pecho y sin querer unas lágrimas me invadían de no se dónde... "Si. Podemos", respondían los discípulos. Y la Abi me abrazaba. Aún no entiendo qué era tan triste... Me aventuro a pensar en lo ridiculo de los discípulos y la profunda perturbación de Jesús en la escena: Ellos le estaban pidiendo una estupidez, considerando que lo conocían y que le habían escuchado tantas veces decir que para ser el primero, había que ser el "último y el servidor de todos"; todo lo pasado junto a él, ignorado por ellos, sus amigos, quienes más encima se aventuraban a mentir sobre el futuro: Lo abandonarían. Otro lo traicionaría. Lo dejarían sólo. Se le veía la mano complicada a Jesús... Lo iban a matar, y sus amigos preocupados de quién tendría los mejores lugares...
No todo fué llanto, eso si. Lucho, Angélica, Juan y Malem, se robaron la película como Pedro, Andrés, Jacobo y Juan, dándonos a entender que a todos nos queda un enorme camino por delante para desmarcarnos de la ridiculez e ignorancia de los discípulos. Una escena notable es esa donde Jesús camina sobre las aguas y los discípulos muertos de miedo piensan que es un fantasma que se acerca a la barca... ¡Las caras de susto de los chiquillos! Era en verdad bonito, chistoso, admirable... verles tan dentro de sus papeles.
Los discípulos en la barca...
Jo me llevó a parte para explicarme la escena de la crucifixión en la sección 6. Cómo debía respirar, cómo debía toser... Luego Andrew logró crear la atmósfera, como lo había sido durante todos los ensayos, de un estudio bíblico empírico, aprovechando cada uno de los eventos.
Todos sufrimos con tener que gritarle esas cosas feas a Jesús; esos silencios tensos, en los que Jesús bendecía el pan en la última cena; los griteríos de "¡Blasfemo!" y "¡Crucifícalo!" que se oían en la última parte del evangelio... Experimentarlo desde el círculo central del escenario no convencional, es fuerte... Dan ganas de no actuar más... Dan ganas de pedir que todo pare... Me venían a la cabeza pensamientos parecidos a los que llegaron cuando Gustavo me dijo en noviembre que querían que representara a Jesús: Lo hermoso por poder hacerlo, siendo yo tan indigno, y lo perturbador de sentirme desamparado en esas escenas... Lo hermoso de Jesús, todo lo que él se atrevió a hacer por nosotros, y lo perturbador de ese mismo acto...
Una escena muy fuerte.
Mis amigos, (puesto que ya éramos todos amigos, incluso los que nos habíamos conocido dos días atrás), tampoco lo pasaron bien en ese sentido... Todos nos abrazábamos como para convencernos de que nadie quería decirle eso a Jesús... Cristopher, que hizo de Judas, no muy grave, pero igual serio, no quería que le tiráramos bromas al respecto. Las negaciones de los discípulos...
Orar, orar, dar gracias por Jesús, por su sacrificio, por sus Palabras, que estaban dentro de nosotros, su Evangelio que venía a consolarnos por la pérdida de nuestra inocencia: "Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación"...
Terminamos como a las 6 de la tarde del sábado, fuimos al Río a disfrutar, el sol había salido, dato importante, puesto que nos habían tocado días fríos y hasta de lluvia... Mañana domingo, temprano, presentaríamos en la Iglesia de Victoria...
Si hay algo que tenía grabado como con fuego en mis neuronas, como se graba en la piel de una vaca con un metal caliente, era el hecho de ser malo memorizando cosas. Y sobre el Experimento Marcos... ¡Tener que memorizar el Evangelio de Marcos completo...!
Cuando el Gustavo (mi asesor del GBU) me dijo después, que no era aprenderse literalmente palabra a palabra el Evangelio, sino el orden de los eventos me tranquilicé; Cuando recordamos juntos en su oración de despedida que tendría que aprenderme todas las palabras de Jesús, me asusté de nuevo.
Igual al acercarme a los textos, la guía del actor que hace de Jesús, tiene muchas ayudas... Aprendí a valorar el aprendizaje memorístico significativo, que por el hecho de ser memorístico había desechado por tanto tiempo en mis concepciones pedagógicas...
Me sentí contento yendo cada semana a la oficina a juntarme con Gustavo y darme cuenta que podía recordar los eventos en orden.
Un día la Abi (Abigaíl Robles) estaba en la oficina y como somos un poco ñoños en algunas cosas, nos pusimos lo tres, con Gustavo, a memorizar las secciones que llevábamos hasta esa semana (parece que era la segunda semana, de las seis). Nos tirábamos un cojín de un sillón de la oficina, y al que le caía, le tocaba decir el evento que venía a continuación.
Las seis secciones de Marcos más la Intro. Según el esquema propuesto por Andrew Page, Están pensadas para aprenderse en 6 semanas, previas a 3 días de ensayos; 10 minutos diarios, disciplinadamente realizados, permiten aprenderse completamente el orden de los eventos del Evangelio en el tiempo estimado.
Poco después, ya a principios de diciembre, me topé con una pelea en la micro a la vuelta del trabajo, eran como las 10 de la noche; unos adolescentes golpearon desde el paradero, en la calle, con una botella de vidrio, a un hombre como de unos 30 años que iba dentro. Se aprovecharon cuando él se asomó para insultarlos por la ventana. Resultado: Él sangraba un poco por la frente y la mano. La micro partió y las personas estabamos algo atónitas. El tipo no se sentó, sino que se quedó de pié, junto a mi asiento; le presté confort (papel higiénico) y le escuché murmurar un "gracias" y un "están picáos los giles ?&%#"!, porque les maté al hermano". Me c... asusté de miedo... Me recobré y le pregunté si estaba bien. Me comenzó a hablar de otras cosas. Al final cometí el horrible error de... hablar... Sin querer lo juzgué, sin querer le hice ver que él estaba mal, y que yo estaba bien, que desde mi lado las cosas se veían mejor, que era yo una persona de bien, supuestamente de bien... Le dije, en lo que para mí fué un detalle al pasar, pero que a él le hizo cambiar completamente su expresión, dejando en evidencia ante mi que estaba bajo los efectos de... algo...
-... igual yo estaría enojado si me hubieran matado un familiar... - ¡Tonto tuto! ¡Toooonto...!
-Y quién soy vó- Aquí cambió su cara...
Me dijo algunas cosas. Me preguntó que de dónde era. Su gratitud al inicio se torno en furia contenida. Comentó que me veía tranquilo, pero que yo le quería hacer algo (ojo, con personas a nuestro alrededor, pero de modo aparente nadie tomaba atención). Cuando me vió en actitud de bajar, me dijo que se iba a bajar conmigo (Glup!). Sentí mucho miedo por una infinidad de razones que, como un torbellino, acecharon mi cabeza, y se tornaron en miedo, mucho miedo... Lamenté demasiado que debido a una feria que se coloca por navidad, el paradero no estaba habilitado y la micro se detuvo media cuadra más allá... Allá, donde estaba oscuro... Oraba mil oraciones por minuto, rogándole a Dios que me protegiera, que no me pasara nada, que el tipo no me hiciera nada con la punta de un cuchillo que llevaba consigo y que había mencionado minutos atrás...
Abajo el tipo me amenzó. Me dijo que qué le quería hacer. Su rabía contenida estaba al tope, como una tetera que está a punto de hervir (ojo. En realidad lo que queremos decir en leguaje coloquial, es que el agua está hirviendo... Pero eso no viene al caso), el tipo estaba muy molesto y levantó su puño diciéndome que me iba a sacar más que la cresta... Le dije en voz poco firme, pero alta, que no quería hacerle nada, que sólo quería ayudarlo porque estaba sangrando y... bueno, no se si le dije alguna otra cosa... El asunto es que el tipo me tiró unos garabatos con rabia, me dijo que me ocupara de mis cosas, que me fuera a mi casa con mi familia... Le dije que se cuidara...
-¡Soy terrible vío, conch"&·/$!...!- Dijo mientras se alejaba.
Yo caminaba con miedo en dirección a mi casa, mirando de vez en cuando por si alguien venía detrás...
Daba gracias a Dios... Muchas gracias...
Las semanas siguientes no me sentí muy bien... Tuve problemas de tiempo para ver a la Dani, lo cual me trajo caras largas con ella. Como escala a Uruguay, para llegar al Conosur, viajamos a Buenos Aires con la Dani y la Alejandra y fué, Buenos Aires, un transitar con la cara larga... Estaba inestable emocionalmente, tuve algunos problemas familiares por las circunstancias del viaje que me dieron mucha tensión y deseos de alejarme de mis tierras...
Escuchaba la voz de mi mamá dos noches antes de partir, diciéndome que mi viaje era una m...! algo malo.
En el Conosur no pude aprenderme todo lo que tenía...
En el avión de vuelta traté de estudiar un poco, pero fué imposible, no pude, estaba muerto de sueño por haber trasnochado conversando con Franco, hijo mayor de los Illanes, que vivían en Maipú, Buenos Aires ¡Al fin conocí a la familia de Loida...!
Llegando a Santiago, era ya la semana 6 y tenía que viajar al Sur, a Temuco, a los tres días de retiro/ensayo, donde nos capacitarían en la obra, nos hablarían profundamente de cómo realizarla y el domingo de esa semana, sería nuestra primera presentación (no al final del Campamento Nacional 10 días después del primer día de ensayo, como yo había pensado...).
-¿Tres días de ensayo? ¿Será verdad?- Pensaba, mientras la Abi me despertaba a las 5.30 de la madrugada y me arrastraba hasta la cocina de Río Quino, para que le recitara las palabras de Jesús mientras me daba café, porque en unas horas más, teníamos que ensayar.
En esa oportunidad nunca me aprendí el orden de los eventos de las secciones 4 a la 6. Fué vergonzoso al final de la segunda tanda de ensayos, no poder terminar de contar las parábolas de la sección 2 con dignidad... dubitativo, inseguro completamente...
En medio de los ensayos, aprendiéndome las partes... Si. La del lado es Jessica Grant
Eso pasó en los ensayos. Pero al principio, cuando llegamos a Río Quino y estuvo el 90 por ciento del elenco, en la noche de bienvenida, la Ruth Gardner (asesora del movimiento en Temuco) oró por lo que le pedí: Que al volver a la realidad de mi cotidianidad, yo no me fuera igual...
Y bueno... Dios me ha tenido paciencia, casi 5 meses después de este Experimento...
